A todos nos puede pasar que, por falta de tiempo o por una mala organización, nos encontremos la tarde antes de un examen con todo el temario por repasar. Aunque estudiar en una sola tarde no es lo ideal, lo cierto es que, si se aprovechan bien las horas, es posible rendir al máximo y obtener un buen resultado. La clave está en la planificación, la concentración y el uso de técnicas adecuadas que potencien la retención del conocimiento.
En este artículo te explicamos cómo organizar una tarde de estudio intensivo para preparar un examen con eficacia. Además, te recomendamos el uso de plataformas digitales como Moodle estudios Almería, donde puedes acceder a recursos bien estructurados para facilitarte el trabajo y optimizar tu tiempo.
¿Por Qué Funciona Estudiar en una Tarde?
Aunque no se trata del método más recomendable, estudiar en una tarde puede funcionar si ya tienes cierta base sobre el tema o si el contenido no es demasiado extenso. Lo importante es tener una actitud activa, evitar distracciones y seguir una estrategia clara que te permita dividir el tiempo de forma inteligente.
Concentrar tu atención durante unas pocas horas puede resultar incluso más productivo que estudiar muchas horas a lo largo de varios días si esas horas no han sido bien aprovechadas.
Paso 1: Preparación del Entorno (15 Minutos)
Antes de ponerte a estudiar, dedica unos minutos a preparar el espacio. Parece un paso insignificante, pero influye directamente en tu rendimiento.
1.1. Ordena tu zona de estudio
Un entorno limpio, ordenado y con buena iluminación favorece la concentración. Elimina elementos innecesarios de la mesa y asegúrate de que todo lo que necesitas esté a mano.
1.2. Evita distracciones
Pon el móvil en modo avión o déjalo en otra habitación. Cierra pestañas del navegador que no estén relacionadas con el estudio. Informa a quienes te rodean de que estarás ocupado durante unas horas para que no te interrumpan.
1.3. Ten preparados todos los materiales
- Apuntes
- Libros de texto
- Subrayadores
- Cuaderno para esquemas
- Reloj o cronómetro
También puedes iniciar sesión en Moodle estudios Almería, donde encontrarás contenidos bien organizados y test de repaso que te facilitarán el aprendizaje.
Paso 2: Planificación de la Tarde (5 Minutos)
Una vez que el entorno esté preparado, dedica unos minutos a planificar tu tiempo. Si, por ejemplo, tienes desde las 16:00 hasta las 21:00, son cinco horas que puedes dividir así:
- Primera hora: Lectura rápida y subrayado del temario
- Segunda hora: Realización de esquemas y resúmenes
- Tercera hora: Estudio activo y memorización
- Cuarta hora: Práctica con preguntas y ejercicios
- Quinta hora: Revisión general y descanso breve entre bloques
Este tipo de estructura te permite repasar todo el contenido sin caer en el agotamiento mental.
Paso 3: Lectura y Subrayado (60 Minutos)
Comienza con una lectura rápida del temario. No leas palabra por palabra, sino que intenta identificar:
- Conceptos clave
- Términos técnicos
- Fechas importantes
- Ideas principales de cada apartado
Subraya lo esencial. Usa diferentes colores para clasificar la información: por ejemplo, rojo para definiciones, azul para ejemplos, verde para fórmulas o datos.
En este punto no necesitas memorizar, solo tener una idea clara de la estructura del contenido.
Paso 4: Esquemas y Resúmenes (60 Minutos)
Una vez identificada la información clave, es momento de reescribirla de forma condensada. Esta parte es fundamental, ya que escribir te obliga a comprender y filtrar lo importante.
4.1. Elabora esquemas visuales
Utiliza mapas mentales, diagramas o listas jerárquicas. Relaciona conceptos mediante flechas o agrupaciones para facilitar la memorización.
4.2. Usa palabras clave
Evita copiar frases enteras. Céntrate en conceptos cortos que puedas recordar fácilmente. Añade dibujos, abreviaturas o símbolos si te ayudan.
El objetivo de esta etapa es transformar un temario largo en un material manejable que puedas repasar varias veces en poco tiempo.
Paso 5: Estudio Activo (60 Minutos)
Durante esta hora, repasa los esquemas que has creado y utiliza técnicas de estudio activo. Estas técnicas son más eficaces que la simple lectura pasiva.
5.1. Técnica de autoexplicación
Intenta explicar en voz alta lo que estás aprendiendo, como si lo contaras a otra persona. Esto te obliga a organizar mentalmente la información y detectar lo que no entiendes bien.
5.2. Repaso espaciado
Alterna los temas cada 20 minutos. Por ejemplo, si el examen cubre tres bloques, dedica 20 minutos a cada uno, luego repite el ciclo. Esto evita la saturación y mejora la retención.
5.3. Técnica Feynman
Escribe un tema complejo como si se lo enseñaras a un niño de primaria. Si no puedes explicarlo con palabras simples, es que aún no lo has comprendido del todo.
Paso 6: Práctica y Ejercicios (60 Minutos)
Una de las mejores formas de estudiar es practicar. Esta hora debe estar dedicada a resolver:
- Ejercicios tipo test
- Preguntas abiertas
- Cuestiones de exámenes anteriores
Resolver preguntas reales te prepara mentalmente para lo que te vas a encontrar en el examen y refuerza tu seguridad.
Paso 7: Revisión Final (60 Minutos)
La última hora debe ser más ligera, enfocada en repasar, consolidar y corregir posibles errores.
7.1. Repasa los esquemas
Haz una lectura rápida de los esquemas. Al haberlos creado tú, tu mente los reconocerá fácilmente. Esto mejora la retención a corto plazo.
7.2. Memoria activa
Cierra los apuntes y trata de recordar en voz alta los conceptos clave. Si hay algo que no recuerdas bien, vuelve a leerlo y repítelo varias veces.
7.3. Toma un descanso breve
Si te sientes saturado, toma un descanso de 5 a 10 minutos entre bloques. Aprovecha para hidratarte, estirarte o tomar un tentempié ligero. Estudiar cansado disminuye el rendimiento.
Consejos Adicionales Para Rendir al Máximo
- Cuida tu alimentación. Evita comidas pesadas. Opta por alimentos ligeros y energéticos como frutas, frutos secos o yogur.
- Hidrátate. Bebe agua con frecuencia. La deshidratación afecta la concentración.
- Cambia de postura. Estar en la misma posición muchas horas puede fatigar. Levántate y estira de vez en cuando.
- Usa música instrumental. Si te ayuda a concentrarte, elige música sin letra, como lo-fi o clásica.
Conclusión
Estudiar para un examen en una sola tarde es un reto, pero también una oportunidad para demostrar tu capacidad de organización, concentración y esfuerzo. Si divides bien tu tiempo, priorizas la información esencial y utilizas técnicas activas de aprendizaje, puedes obtener buenos resultados incluso con poco margen.
La próxima vez, intenta comenzar antes. Pero si solo tienes una tarde, ahora sabes que puedes aprovecharla al máximo. ¡Mucho ánimo y éxito en tu examen!
